Situada en la provincia de Sevilla, en una zona llana con tierras
fértiles, regadas por el río Corbones. Una ciudad dedicada tradicionalmente al
cultivo del olivo y del cereal. Cuna de grandes artistas del flamenco como Pepe
Marchena y el guitarrista Melchor de
Marchena.
Ha sido declarada Conjunto Histórico-Turístico por su importante
conjunto monumental. También se caracteriza por su Semana Santa, aunque a lo
largo del año también hay diversas celebraciones que hacen que sus habitantes
pueblen las calles: la Feria, el Corpus Christi, las cruces de Mayo, las
procesiones del patrón y la patrona del pueblo; San Sebastián y Nstra. Sra.:
del Rosario. También se realizan eventos humanitarios como el día de Manos
Unidas, donde la mayoría de los marcheneros pasan el mediodía y la tarde en la
plaza del ayuntamiento, además colaboran con la asociación. Volviendo al tema
monumental, Marchena alberga iglesias con un gran patrimonio, como la Iglesia
de San Juan, es una de las más importantes del municipio. Es característica del
tiempo de los Reyes Católicos, es decir, es de estilo gótico mudéjar con toques
renacentistas. El gótico se ve en las portadas y en el retablo mayor. Contiene
imágenes evangélicas en relieve, pinturas de Alejo Fernández, una cabeza del
Bautista en mármol y escudos duales y del arzobispo Fray Diego de Deza. También
hay que mencionar el espectacular órgano, obra de Francisco Rodríguez,
discípulo del organero Jorge Bosch y el coro de estilo barroco, tallado por
Juan Valencia. Además esta iglesia alberga en su interior esculturas de Alonso
Cano, el tesoro de la iglesia orfebre Francisco Alfaro y nueve cuadros de
Zurbarán.
La Iglesia de Santa María de la Mota, también de estilo gótico
mudéjar, construida en el siglo XVI. El templo simboliza la unión de las
culturas cristiana (con elementos constructivos básicos y solidez), islámica
(con la ornamentación imaginativa y bizantina (con los azulejos). La Iglesia
presenta tres naves, separadas por pilares. Las cubiertas de las naves son
estructuras de madera, en forma de artesa en la central y el colgadizo en las
laterales. El presbiterio (espacio que precede al altar mayor), se cubre con
bóveda de nervaduras. Tiene dos portadas, una lateral, de ladrillo y otra a los
pies, ejecutada en sillería. En el mismo sitio está el Convento de la
Inmaculada Concepción, fundado por los duques de Arcos. La comunidad de
hermanas clarisas de Marchena elaboran dulces y repostería de gran
reconocimiento.
La Iglesia de San Agustín, construida en la segunda mitad del siglo XVIII, se nota la transición del barroco neoclásico. Tiene planta de cruz latina, con tres naves levantadas con pilares que llevan columnas adosadas. Sobre el crucero hay una amplia cúpula. En el interior se observa una decoración religiosa. En el exterior, el pórtico se abre en tres arquerías.
La Iglesia de San Sebastián, construida fuera del recinto amurallado, en un principio, probablemente fue hecha como una ermita para la adoración del Patrón de Marchena. Después de derribar dicha ermita se inauguró el capitel. Su interior es de tres naves separadas por pilares, que se cruzan con arcos de medio punto. La nave principal está cubierta por un artesonado de madera, sin embargo, el retablo principal es barroco, de mediados del siglo XVIII. Tiene tres calles separadas por estípites (pilastras tronco piramidales invertidas), situándose en los laterales de las esculturas de San Sebastián y San Pablo. El acceso a la iglesia se encuentra en el muro izquierdo.
La Iglesia de San Miguel.
La Iglesia de Santo Domingo.
La Iglesia de Santa Clara.
La Iglesia de Santa Clara.
La capilla de San Francisco.
Además de los conventos de Santa Isabel, San Andrés y
la Inmaculada Concepción.
Marchena también posee varias casas señoriales situadas en diversos lugares del municipio.
Una biblioteca (antigua casa fábrica) digna de contemplar.
Una casa palacio, situada en el barrio de San Juan, frente a la Iglesia. Fachada típica barroca. El inferior una entrada adintelada entre columnas. El superior un balcón señorial bajo frontón donde se aloja el escudo de armas. En el interior destaca el clásico patio a cielo abierto. En esta casa nació Lorenzo Coullaut Valera, importante escultor, que posee un museo en el municipio.
La casa Ave María, con 500 años de antigüedad, propiedad de Juan Coullaut, tiene un patio en forma de L y se rodea por doble arcada de columnas toscanas sosteniendo arcos de medio punto. Dichas galerías se cubren con artesonado mudéjar. La Casa se construyó a finales del siglo XV, siguiendo el estilo del renacimiento. Actualmente contiene muchas piezas procendentes de excavaciones y donaciones.
Alrededor del municipio hay diversas portadas monumentales que antiguamente eran puertas del pueblo: puerta de la Alcazaba, puerta de Morón, puerta de Sevilla (conocida como el Arco de la Rosa), esta última es una de las imágenes más características de Marchena, estas dos torres y parte de muralla sirvió de defensa,
En definitiva, hay razones más que suficientes para visitar este pueblo, porque Marchena, te llena.